Trastornos del sueño
El sueño es algo necesario para sobrevivir y gozar de buena salud, pero todavía no se sabe por qué se necesita el sueño ni exactamente cómo nos beneficia, (hay varias teorías al respecto).
Las variadas necesidades individuales de sueño varían ampliamente y en los adultos sanos van desde tan sólo 3 horas diarias de sueño hasta 9 horas o más horas.
En general, las personas duermen de noche aunque muchas lo hacen durante el día debido a sus horarios de trabajo, situación que a menudo ocasiona trastornos del sueño. Los trastornos del sueño pueden ser ocasionados por una amplia diversidad de situaciones, acontecimientos, etc.
Unos vienen caracterizados por la cantidad, calidad y horas del sueño, otros se caracterizan por acontecimientos o conductas anormales asociadas al sueño, a sus fases o a la transición sueño-vigilia. También se debe considerar si hay retraso mental, alguna enfermedad médica o el trastorno está inducido por la ingesta de alguna sustancia.
Los trastornos del sueño pueden admitir numerosas clasificaciones, pero se pueden agrupar en dos apartados:
Las disomnias, o dificultades para conciliar o mantener el sueño, como el insomnio (el trastorno más frecuente, sin duda), la narcolepsia o la apnea del sueño, y las parasomnias, que se suelen producir durante el sueño, como el sonambulismo, el bruxismo (rechinar de dientes), el terror nocturno, pesadillas y la enuresis nocturna (orinarse durante el sueño).
CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS DEL SUEÑO:
Según el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-IV) los trastornos del sueño se clasifican en cuatro grandes grupos según su etiología:
1) TRASTORNOS PRIMARIOS DEL SUEÑO:
Son los trastornos del sueño en los que no hay otra enfermedad mental, médica ni ingesta de sustancias. Estos trastornos se dividen en disomnias y parasomnias.
Disomnias:
Trastornos primarios del inicio o mantenimiento del sueño y somnolencia excesiva, caracterizados por la cantidad, calidad y horas del sueño. Donde encontramos los siguientes trastornos del sueño:
• Insomnio primario.
• Hipersomnia primaria.
• Narcolepsia.
• Trastorno del sueño relacionado con la respiración.
• Trastorno del ritmo circadiano.
• Disomnias no especificadas:
– Síndrome de piernas inquietas idiopático.
– Movimientos periódicos de las piernas, (mioclonus nocturno).
– Otras disomnias.
Parasomnias: Caracterizados por acontecimientos o conductas anormales asociadas al sueño, a sus fases o a la transición sueño-vigilia. En este aparto se incluyen:
• Pesadillas.
• Terrores nocturnos.
• Sonambulismo.
• Parasomnias no especificadas:
– Trastorno comportamental del sueño REM.
– Parálisis del sueño.
– Jactatio capitis nocturna.
– Trastornos del sueño asociados a menstruación.
– Otras Parasomnias.
2) TRASTORNOS DEL SUEÑO RELACIONADOS CON OTRO TRASTORNO MENTAL:
Son alteraciones del sueño debido a un trastorno mental, normalmente por algún trastorno del estado de ánimo o por un trastorno de ansiedad.
3) TRASTORNO DEL SUEÑO DEBIDO A UNA ENFERMEDAD MÉDICA: Alteraciones del sueño a consecuencias de los efectos de una enfermedad médica.
4) TRASTORNO DEL SUEÑO INDUCIDO POR SUSTANCIAS: Alteraciones del sueño por consumo o abandono de consumo de alguna sustancia.
INSOMNIO:
De todos los trastorno del sueño, vamos a hacer hincapié en el trastorno que creemos es el más importante de todos, ya que posiblemente es el que aparece con mayor frecuencia de entre todos los trastornos del sueño. Estamos hablando del insomnio, el trastorno del sueño más común.
El insomnio viene caracterizado por dificultades en iniciar y mantener el sueño, también por despertares nocturnos o despertarse mucho antes de lo deseado, por sensación de sueño no reparador, cantidad, calidad, horas de sueño, etc.
De los trastornos del sueño el insomnio es probablemente el más común. Existen varios tipos de insomnio. En algunos casos el paciente tiene muchas dificultades para conciliar el sueño; en otros el paciente puede fácilmente dormirse pero se despierta numerosas veces durante la noche (despertares nocturnos); y en otros casos el problema es que el paciente se despierta muy temprano y no puede conciliar de nuevo el sueño; todo ello puede venir acompañado de la sensación de sueño no reparador. El insomnio puede ser causado por una gran variedad de factores entre los que se encuentran el estrés, el exceso de alcohol o de cafeína, abuso de sustancias o abandono de las mismas, varios desordenes fisiológicos, etc.
El insomnio puede ser un problema verdaderamente frustrante y muchas veces los esfuerzos que hacemos para dormir no hacen sino agravar aún más la situación. Los bebés duermen cerca de 17 horas al día, que se reducen a 9 o 10 horas cuando se van haciendo mayores. La mayoría de los adultos necesitan entre 7 y 8 horas de sueño cada noche, aunque éstas serán menos según el individuo envejezca. Existen grandes diferencias entre unas personas y otras, hasta el punto que algunas personas pueden estar bien con sólo 3 horas de sueño por noche. Las personas mayores necesitan menos horas de sueño que el adulto joven y es frecuente que por las noches se encuentren despiertos, especialmente si durante el día han dormido la siesta.
Consideraremos insomnio cuando se duerme menos de 3 horas y sueño normal cuando se duerme 3 o más horas. Algunas veces dando esta explicación al paciente es suficiente, se tranquiliza y con ello deja de preocuparle lo poco que él creía que dormía. Al estar más tranquilo y dejar de preocuparle el tema, éste duerme más y mejor. Lo de dormir las 8 horas no es más que una media.
El insomnio es un importante problema de salud pública. No solo afecta al descanso nocturno, sino que además influye negativamente sobre el funcionamiento diurno de quien lo padece. Las consecuencias son negativas, ejemplo:
- Alteración del estado de ánimo.
- Alteración de la motivación.
- Disminución de la concentración.
- Disminución del rendimiento.
- Problemas psicofisiológicos.
- Fatiga.
- Etc.
SUBTIPOS DEL INSOMNIO: Dentro del insomnio tenemos tres subtipos principales, acompañados de un cuarto subtipo que puede estar presente en cualquier de los tres primeros subtipos:
• Insomnio de conciliación: Dificultades para iniciar el sueño. Normalmente duermen bien durante toda la noche, el problema radica en que tardan mucho en conciliar el sueño, en que tienen dificultades para conciliar el sueño al acostarse.
• Insomnio de mantenimiento: Dificultad para mantener el sueño durante toda la noche, normalmente es a causa de frecuente despertares nocturnos.
• Insomnio terminal: El paciente no presenta dificultades para comenzar a dormir, pero se despierta muy pronto (aún siendo de noche) y no puede volver a conciliar el sueño, o tiene muchas dificultades para ello.
• Sensación de sueño no reparador: El paciente no tiene dificultades para iniciar o mantener el sueño, sin embargo tiene la sensación de no haber tenido un sueño reparador.
CAUSAS DEL INSOMNIO: Son muchas las causas que nos impiden dormir bien. El estrés, hábitos inadecuados de descanso, problemas ambientales (ruido), mala alimentación, bebidas alcohólicas y excitantes, fuerte actividad física antes de dormir, uso inadecuado de la cama, excesivo calor, enfermedades físicas, etc.
Irnos a la cama sólo cuando tenemos sueño, crear un ambiente relajado y cenar siempre a la misma hora son sólo algunas pautas que nos pueden ayudar a mejorar la calidad del sueño. Nuestra memoria, creatividad y capacidad de trabajo se verán recompensadas.
La rutina es muy importante, procura acostarte siempre que puedas a la misma hora, tu cuerpo y tu mente lo agradecerán.
MORFEO: Morfeo, hijo del Sueño (Hipno) y de la Noche (Nix), se muestra a las personas dormidas durante la noche para trasmitirles los mensajes de los dioses y vela para que nadie despierte de su letargo a su padre. A pesar de los desvelos de esta divinidad nocturna, el 30% de los españoles no logra caer en sus brazos. Ésta es una cifra demasiado elevada como para no prestarle la atención que se merece, al fin y al cabo, el ser humano pasa una gran parte de su existencia durmiendo, o al menos intentándolo.
Dormir mucho, no dormir, dormir mal, dormir a ratos… las variaciones son infinitas y cada paciente que las padece sufre las consecuencias de día y de noche. Solo los que sufren insomnio noche tras noche saben lo desesperante que puede ser querer dormir y no poder. El sueño es absolutamente necesario para mantener un perfecto equilibrio físico y psíquico, y para levantarse fresco y animoso frente a los desafíos del nuevo día.
En la Clínica Hipnos tratamos todo tipo de trastornos asociados al sueño.
Método en hipnosis propio y exclusivo.